Retribuir

La universidad màs aleccionadora que puede existir se llama: vida. Ella nos enseña y nos indica el camino a base de duras lecciones.

Al momento de mi mundo cambiar,muchas personas se acercaron con la mejor disposiciòn a tendernos la mano,ayudarnos y acompañarnos en esta nueva etapa. Ha sido tan increible el apoyo que hemos recibido que siempre le pido a Dios que me permita retribuir de alguna manera lo mucho que he recibido.

Aprendi que el agradecimiento y la humildad son valores importantes que poco a poco se han estado perdiendo; debemos cultivarlo de nuevo en nosotros y en los demàs. Nunca olvides ayudar a quien te ayudo,agredecer a quien te de forma desinteresada te asistio;siempre da lo mejor de ti en cada acto.

Como dice el viejo refran"haz el bien sin mirar a quien"

Apoyo

Hay un viejo dicho que dice que en las circunstancias difíciles es que conoces con quien puedes contar y con quien no. En mi caso las muestras de apoyo fueron y siguen siendo infinitas.

En tan solo cuestión de horas comenzaron a llegar las personas más cercanas a mis padres(algunas de esas personas desconocidas para mi),mi familia y mis amigos al hospital mientras me operaban;al momento de entrar a verme todos iban con sus caras llorosas pero con palabras de ánimos(hicieron de tripas corazones)día tras día estaban pendiente de mi evolución,de ayudar y colaborar en lo que pudieran.Hoy pasado tanto tiempo sigo sintiendo ese apoyo,aplauden mi evolución ,celebran cada paso que doy,me llenan de detalles,cariño y sincera amistad.

Estas lineas son para ustedes mis viejos y bien recibidos nuevos amigos,que sin importar la distancia,las ocupaciones,sus agendas apretadas hacen un huequito para hacerme sentir que están al lado de mi camino festejando esta nueva fase.

Sin ustedes nada de esto es posible,todos han aportado en mi su granito de arena. Los amigos son esa familia que eliges y se vuelven eternos compañeros en un viaje sin retorno.

Aquella noche

El 29 de Abril de 2011,fue el día en que mi mundo(y el mundo de mi familia y amigos)cambió. Recuerdo que ese día comenzó con la rutina de siempre,era viernes y lo que más anhelaba era que las horas en la oficina se fueran volando para poder regresar a mi casa.

No me esperaba que mi vida cambiara a las 10:40 p.m en la estación del metro El Silencio,recuerdo que el ambiente en el anden era pesado e inquietante;mi último recuerdo en pie es ver a lo lejos las luces del metro,luego todo fue oscuridad y dolor.Recuerdo abrir mis ojos y ver como el metro pasaba por encima de mi,hasta que saque fuerzas y pude gritar(no pare de gritar)para que lo detuvieran luego vino el momento de esperar el rescate,recuerdo como arañaba los rieles y pensaba en mi madre y me decía"no la puedo dejar sola";todo pasaba muy rápido como una película. Esto ya es parte de mi pasado,un momento doloroso pero ya superado.

Una vez mi mamá entre lagrimas preguntaba:donde estabas Dios cuando mi hija cayo a los rieles?,y alguien se le acerco y le dijo: halandola por los brazos,porque las piernas se reponen pero la cabeza no. Ambas entendimos entonces que Dios escribe recto sobre lineas torcidas.